Un análisis exhaustivo de las estadísticas operativas del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) muestra un patrón claramente distinto en la manera en que se efectúan los arrestos de inmigrantes sin documentación en los Estados Unidos. Las estrategias implementadas por ICE cambian notablemente dependiendo de la tendencia política del estado, provocando un escenario migratorio muy desequilibrado entre áreas demócratas y republicanas.
En los estados que respaldaron al expresidente Donald Trump, los agentes de ICE realizan la mayoría de sus arrestos directamente en cárceles y prisiones. Por el contrario, en los estados que votaron por la actual candidata presidencial demócrata Kamala Harris, las detenciones se ejecutan predominantemente en comunidades, lugares de trabajo y espacios públicos. Esta divergencia ha generado no solo tensiones políticas, sino también un clima de miedo e incertidumbre en barrios con alta población migrante, especialmente en regiones con políticas de santuario.
Variaciones estructurales en las estrategias de captura
Según los registros analizados, el 59 % de los arrestos en estados republicanos se llevan a cabo en centros de detención, mientras que en los estados demócratas el 70 % de las detenciones ocurren en la comunidad. Aunque ambos grupos de estados presentan poblaciones indocumentadas similares, la forma en que ICE actúa en cada territorio refleja un enfoque táctico diseñado en función de las leyes locales y las políticas de cooperación con las autoridades federales.
Los estados que facilitan una colaboración más estrecha entre las autoridades locales e ICE, como Mississippi, muestran un porcentaje elevado de detenciones en instalaciones penitenciarias. Por otro lado, en áreas como Nueva York y Massachusetts, donde las políticas de santuario restringen o bloquean este tipo de cooperación, la agencia ha incrementado su actividad en las vías públicas y en intervenciones públicas.
Impacto en comunidades vulnerables
En Massachusetts, uno de los estados con políticas más restrictivas hacia ICE, el 94 % de los arrestos se han efectuado en la comunidad, y un 78 % de las personas detenidas carecía de antecedentes penales. La situación ha generado efectos colaterales significativos. En localidades como Chelsea y Everett, donde se concentran comunidades migrantes de Centroamérica, se ha reportado un descenso en la asistencia escolar, consultas médicas y otras actividades cotidianas, producto del temor a ser detenidos.
Grupos locales y activistas por los derechos de los inmigrantes alertan sobre el aumento de patrullas, operativos inesperados y arrestos en áreas públicas, lo que ha cambiado comunidades dinámicas en lugares callados y reservados. La táctica de captar personas en lugares públicos, según los opositores, tiene un efecto intimidatorio y pretende influir en las autoridades locales para que cambien sus normas de seguridad para migrantes.
Un sistema de detención en crecimiento
Durante el mandato de Trump, los arrestos llevados a cabo por ICE presentaron un incremento constante. La tasa de detenciones en la comunidad llegó al 44 %, en comparación con el 27 % observado bajo la administración de Joe Biden. A pesar de que el Gobierno actual pone énfasis en detener a inmigrantes con antecedentes criminales, la comparación muestra una inversión considerable en mecanismos de aplicación migratoria durante el gobierno anterior.
El presupuesto federal ha respaldado esta expansión, destinando miles de millones de dólares adicionales a ICE. A la vez, un número creciente de agencias policiales estatales y locales, especialmente en estados republicanos, se ha unido a programas de colaboración con ICE, fortaleciendo su capacidad operativa.
Tensiones en torno a las políticas de santuario
Los integrantes del gobierno de Trump han defendido que el aumento de detenciones en las comunidades es un resultado directo de las políticas de santuario, las cuales prohíben a las autoridades locales arrestar a inmigrantes basándose solo en órdenes administrativas de ICE. Desde este punto de vista, las operaciones visibles se considerarían una reacción a la imposibilidad de acceder a las prisiones locales.
Sin embargo, defensores y juristas experimentados afirman que estos enfoques tienen el propósito de sancionar a aquellas jurisdicciones que no aceptan la política migratoria del gobierno federal. Culpan a ICE de emplear métodos que sobrepasan los límites razonables y de usar el temor como herramienta de manipulación social.
Ejemplos destacados y aumento de quejas
Las acciones de ICE en Massachusetts han abarcado arrestos destacados, como el de un estudiante de doctorado que también ha sido coautor de un artículo de opinión, o la captura violenta de un inmigrante retirado del asiento del copiloto ante su familia. Especialistas en derecho consideran que estas medidas muestran una nueva dosis de agresividad por parte de la agencia.
Además, testimonios de residentes como el de Geovani Esau De La Cruz Catalan, joven arrestado poco después de su graduación escolar, ilustran el impacto humano de esta política. Su historia evidencia cómo individuos sin historial delictivo se ven atrapados en una red que castiga sin distinción.
Un sistema inequitativo basado en el código postal
La diferencia en la implementación de las leyes migratorias ha provocado lo que algunos expertos denominan un «sistema desigual» de justicia migratoria en Estados Unidos. La ubicación donde viva un inmigrante se ha vuelto un elemento crucial para el tratamiento que obtendrá de las autoridades.
Mientras algunos estados colaboran activamente con ICE, otros limitan su accionar a través de decisiones judiciales y políticas locales. Esta fragmentación contribuye a la creación de experiencias migratorias profundamente divergentes, que ponen en tela de juicio la coherencia de las políticas federales.
La discusión sobre las políticas migratorias, su puesta en práctica y su impacto en las comunidades continuará siendo un tema crucial en la agenda pública, especialmente en un contexto electoral donde la migración se convierte nuevamente en un asunto de intensa carga política.